Los Cachorros de Chicago vencieron 3-1 a los Padres de San Diego este martes 30 de septiembre en el Juego 1 de una de las Series de Comodín de la Liga Nacional, como parte de la postemporada de la MLB. Dicho encuentro aconteció en el Wrigley Field, recinto que acogió a 39,114 aficionados.
Los frailes golpearon primero en el desafío, fabricando su única carrera de la tarde en la segunda entrada. Para ello se combinaron par de dobles consecutivos, abriendo inning, de Jackson Merrill y Xander Bogaerts.
En todo el resto del partido San Diego solo pegó dos sencillos aislados, otro del propio Bogaerts en el cuarto capítulo y uno de Freddy Fermín en la entrada siguiente. El pitcheo de los anfitriones retiró en línea a los últimos 14 bateadores de los Padres en la cartelera.
Par de jonrones fueron decisivos en triunfo de los Cachorros de Chicago
Los oseznos remontaron en el quinto episodio, cuando el japonés Seiya Suzuki abrió tanda sacando la pelota del parque tras cazar una recta de cuatro costuras a 94.5 mph del abridor Nick Pivetta. Acto seguido, Carson Kelly imitó a su compañero con otro batazo de vuelta completa (este frente a una recta de cuatro costuras a 94.7 mph), por la misma zona del terreno (left-center), para darle a los Cachorros una ventaja que no perderían.
La tercera y última rayita de los locales sucedió en el octavo, impulsada por elevado de sacrificio de Nico Hoerner. La victoria en el partido correspondió al relevista venezolano Daniel Palencia, quien no toleró libertades en 1.2 innings.
Con el descalabro cargó el canadiense Pivetta, quien lo hizo bien en cinco entradas (nueve ponches, ningún boleto, apenas tres hits y dos carreras por vuelacercas) pero no recibió el respaldo ofensivo de sus compañeros. Hubo punto por juego salvado para el cerrador Brad Keller.
Por los Padres trabajó un capítulo el lanzador cubano Adrián Morejón, a quien le pegaron dos indiscutibles pero no le fabricaron anotaciones, ayudado por una jugada de doble play. Realizó nueve envíos para el plato y todos fueron strikes.
Cuatro de sus disparos sobrepasaron las 95 millas por hora, con una velocidad máxima de 99.6 mph con su sinker ante Kyle Tucker. Este miércoles 1 de octubre tendrá lugar el segundo partido de la serie, con San Diego obligado a ganar para mantenerse con vida.