Lance McCullers jr. (0-1) no tuvo el regreso a casa que hubiera esperado luego de más de dos años de ausencia, sin embargo eso no impidió que su público se pusiera de pie y lo aplaudiera luego de sacar apenas un out y permitir siete anotaciones limpias ante la batería de Cincinnati. El diestro de raíces cubanas llegó a la jornada de hoy con la segunda mejor efectividad de todos los tiempos en este estadio (2.67, superado únicamente por el 2.55 de Roger Clemens) para un lanzador con al menos 250 innings.
El primer relevista Logan VanWey vino a tratar de sofocar el fuego y no hizo sino más que atizarlo al permitir otros dos hits y regalar dos bases por bolas más (McCullers había otorgado tres y permitido tres hits). Todo esto dio al traste con que el equipo de Ohio anotara diez veces en la misma primera entrada y terminara ganando el choque con pizarra final de 13-9.
Además de VanWey que trapeó dos innings, el bullpen de los Astros fue severamente maltratado, cuando otros cuatro relevistas debieron comerse los restantes seis y dos tercios. Fueron ellos Bennett Sousa (1.2 IP), Tayler Scott (2.0 IP), Steven Okert (2.0 IP) y Kaleb Ort (1.0 IP). Tal exceso de trabajo seguramente hará que el equipo vaya a Triple-A mañana en busca de auxilio para finalizar la serie.
La ofensiva estuvo a la altura, de hecho llegaron a superar en hits a sus victimarios (14-12), y aunque luego de ese fatídico primer episodio de diez carreras visitantes fueron ellos los que anotaron nueve de las restantes doce, no les alcanzó para igualar el marcador y cayeron nuevamente al récord de .500 (19-19).
Jeremy Peña bateó de 6-3 con un doblete y dos remolcadas y llevó la voz cantante, mientras que Víctor Caratini tuvo de 5-3, con vuelacercas y tres producidas para secundarlo. También lograron juego de múltiples hits Isaac Paredes (de 4-2) y Yainer Díaz (de 4-2), quedando los restantes imparables en los bates de Brendan Rodgers, Christian Walker (triple) Zach Dezenzo y Jake Meyers.
Amenaza a Lance McCullers jr.
La peor nota del juego, sin embargo, no la puso el resultado ni la temprana salida del mismo de José Altuve por molestias en el tendón de la corva derecha, sino un inadaptado que se atrevió a amenazar a Lance McCullers con hacerles daño a su esposa y sus hijas si se las encontraba en la calle.
“Entiendo lo pasional que es la gente con su equipo, pero amenazar con quitarle la vida a mi esposa y a mis niñas es algo difícil de aceptar para mí”, dijo McCullers al término del partido, al tiempo que tanto el manager Joe Espada como un vocero del equipo dijeron que los Astros han alertado al departamento de policías de la ciudad de Houston sobre las amenazas.