HOUSTON, TX – Un cuadrangular de tres carreras de Adam Duvall en la parte alta de la décima entrada sepultó las aspiraciones de los Astros y le agenció a los Medias Rojas su primera victoria en la serie que disputan ambos rivales durante este intermedio de semana en Minute Maid Park. El jardinero central patirrojo le pescó un envío sinkeado al veterano Kendall Graveman para su segundo hit de la jornada, haciendo además que el récord de los locales en extrainning se desplomara a 1-8.
José Urquidy, el abridor por el conjunto de casa, toleró ocho indiscutibles y cuatro rayitas limpias en cuatro episodios y dos tercios. El mexicano utilizó exactamente 100 pitcheos para completar su labor, que además incluyó un ponche y tres boletos. A su salida del montículo le siguieron en orden: Seth Martinez, Hector Neris, Bryan Abreu y el cerrador Ryan Pressly, todos ellos hasta que hiciera su fatal entrada Graveman, quien a la postre cargó con el revés (3-6). El triunfo fue para Nick Pivetta (9-6).
Algunas declaraciones de José Urquidy luego de su apertura de hoy ante los #MediasRojas pic.twitter.com/qOjWgavBjv
— Javier Gonzalez (@Astros_Coverage) August 24, 2023
La ofensiva se hizo presente una vez más, en esta ocasión acumulando una docena de imparables (tres más que sus victimarios). El dominicano Yainer Díaz triplicó en cinco turnos y fue de los más destacados. Mientras, tanto Chas McCormick como Jeremy Peña duplicaron, dejando los restantes hits en las cuentas particulares de José Altuve, Alex Bregman, Jake Meyers, Martín Maldonado y el cubano José Abreu. Este último jugó su primer partido luego de regresar de la lista de lesionados y lo saldó con doblete y producida en cinco turnos. De la alineación titular, solo Kyle Tucker se fue en blanco.
La serie cierra mañana en la ciudad de Houston con un enfrentamiento vespertino entre los novatos JP France por los de casa y el dominicano Bryan Bello por el conjunto de Massachusetts. El duelo está señalado para la 1:10 pm, hora local, y será de vital importancia para ambas partes. Boston se aferra desesperadamente a la última plaza de los comodines, mientras los Astros aspiran a comandar la división oeste del joven circuito por primera vez en la temporada.