HOUSTON, TX – La verdad es que ya nada tenía que hacer en las menores, era una liga que le quedaba muy pequeña y su línea de 342./411./640./1051 era su mejor y más fiel testigo. Lo cierto es que ya para el día 4 de mayo la organización de los Rangers de Texas decidieron llamar desde Round Rock Express (Triple A) a Andy Ibáñez, tomando en cuenta que el equipo mayor había batallado ofensivamente durante todo el mes de abril y los últimos días de marzo, logrando un pobre OPS combinado de 670 (posición 24 de MLB).
Su debut en la Gran Carpa fue precisamente conectado de hit ante el diestro Taylor Rogers (Twins), sin embargo, luego de ahí pegó solo dos indiscutibles en los próximos 20 turnos, lo cual lo llevó de vuelta a las menores el día 21 del propio mes. Al final Ibáñez grabó un promedio de bateo de 143 en mayo.
Exactamente un mes después (21 junio), los Rangers traen de regreso al cubano al equipo de Grandes Ligas, y desde ese instante hasta el final de la temporada, su rendimiento no paró de aumentar con cada mes que pasaba. Logró batear 233 en junio, luego subió a 242 en julio, 310 en agosto, y cerró septiembre con 357 de average. Esto obviamente posibilitó, no sólo su permanencia en el Big Show, sino además que se adueñara de la antesala de los Vigilantes por el resto del torneo.
“…no me rendí y ahí están los resultados. Es una gran experiencia para mi y para los muchachos cubanos que están también en ligas menores que no se pueden rendir…sigan trabajando que Dios premia los resultados”
Andy Ibáñez a @pelotacubanausa sobre su trabajo para llegar a MLB pic.twitter.com/ebEzJp0eYI— Javier Gonzalez (@Astros_Coverage) October 2, 2021
“No me rendí y ahí están los resultados”, dijo el nativo de la Isla de la Juventud a PelotaCubanaUsa finalizando la temporada. “Es una gran experiencia para mi y para los muchachos cubanos que están también en ligas menores que no se pueden rendir…sigan trabajando que Dios premia los resultados”.
Al decir de su ex entrenador de bateo, el dominicano Luis Ortiz, “Es una satisfacción poderlo entrenar, tiene una mente abierta y trabaja como un monstruo”. Ese mismo trabajo al que hacía alusión Ortiz, fue la razón que conllevó a que Ibáñez dejará un astronómico 398 BA de la segunda mitad de agosto en adelante, mientras el más cercano promedio dentro de los jugadores del equipo (Isiah Kiner-Falefa) en ese mismo período de tiempo se situó casi 100 puntos al sur (300 BA).
Luis Ortiz, entrenador de bateo de los #Rangers, habla conmigo para @pelotacubanausa en relación a los ajustes que ha realizado con Andy Ibáñez para dispararlo ofensivamente hasta llevarlo a batear 357 en el mes de septiembre. pic.twitter.com/pNHH60fMNh
— Javier Gonzalez (@Astros_Coverage) October 2, 2021
Jugando para un equipo que sobrepasó el centenar de derrotas por primera vez en la historia de la franquicia, y dejando unos splits 277./321./435./756 en 76 partidos, es muy lógico pensar que el cubano tiene su puesto asegurado para la siguiente campaña, por ello tomó la decisión de no jugar pelota invernal esta temporada baja.
“Voy a descansar. Creo que he jugado mucho entre Grandes Ligas y liga menor en Triple A. Creo que he jugado demasiado, entonces pienso que necesito un receso”, sentenció.