Por Jesse Sánchez
Mientras jugaba pelota en Cuba, el primera base de los Astros, Yuli Gurriel, ganó casi todos premios individuales posibles en la Serie Nacional. Allá, era una estrella consolidada. Aquí, es una estrella naciente.
Pero aun con toda la experiencia que tiene Gurriel, tanto en la isla como en otras partes, el veterano todavía no sabe a qué hora es que el puertorriqueño Carlos Correa quiere jugar videojuegos -fútbol, específicamente- cada día.
«Allá en Cuba, solíamos jugar sólo en la tarde justo antes de los juegos, como a las seis», dijo Gurriel con una sonrisa. «Pero aquí tenemos que jugar en la mañana, en la noche, o cuando se pueda antes de los juegos. Carlos está listo todo el tiempo. Se conoce el calendario».
Gurriel, quien está en su primera temporada completa con Houston, ha aprendido rápidamente que una campaña de Grandes Ligas no es pura diversión y juegos. El calendario de 162 encuentros no es de bromas.
«En Cuba se juegan 90 juegos toda la temporada. Juegas tres días y luego descansas uno. Aquí puedes jugar 12 días seguidos. Es diferente», dijo Gurriel. «Tienes que prepararte muy bien en el invierno para esta temporada tan larga. Los pitchers son los mejores del mundo. Los pitcheos se mueven mucho, no es como si te estuviesen tirando recta tras recta. Eso también es diferente».
Gurriel, quien disputó 36 cotejos con los Astros tras firmar con Houston en verano pasado, ha hecho algunos ajustes. Bateó .304 con 28 hits en 92 turnos, incluidos nueve dobles, cinco jonrones y 20 empujadas en 22 juegos para llevarse el premio al Novato del Mes de la Liga Americana en julio. En ese tramo, el cubano encabezó a todos los novatos del circuito en hits, dobles, empujadas, slugging y OPS.
El infielder se despertó el miércoles con 21 hits en sus últimos 14 juegos, después de irse de 5-2 el martes contra los Diamondbacks.
«La temporada es intensa. Los entrenamientos de primavera fueron intensos», dijo Gurriel. «Creo que el manager hace un buen trabajo dándonos descanso cuando es necesario. Y tenemos una banca muy fuerte, así que no es que bajemos el nivel. Este es tremendo equipo. No siento que estemos tan frescos como cuando comenzó la temporada, pero eso es normal».
Gurriel ya ha jugado 105 encuentros esta campaña, un tope personal. Recuerda que una vez disputó 152 juegos, 90 en Cuba y 62 en Japón, entre 2013 y 2014. ¿La diferencia? La pausa que se tomó entre el final de la temporada en Cuba y el inicio de la actividad en Japón.
«Todo es nuevo para él, bien sea lo largo del calendario o los lanzadores. Sus ajustes a la liga han sido buenos y entiende el calendario», afirmó el manager de los Astros, A.J. Hinch. «Es un muchacho divertido y está feliz en el equipo. Todo es nuevo, incluso para alguien que ha jugado tanto tiempo a nivel internacional. Es una experiencia nueva para él».